Habitas frescas salteadas con cebolla y chipirones


Habitas frescas salteadas con cebolla y chipirones

Habitas frescas salteadas con cebolla roja y chipirones a la plancha por Tomas Hinojas en Recetas de Alarma

Empezamos hoy con una receta de coser y cantar. De hecho, es una receta de desgranar y cantar. Aprovechad que estáis todos recluidos en casa para sentar a todos a desgranar habitas frescas, una escena familiar casi imposible en condiciones normales.

Ya os dije ayer que las que salgan más grandes o con la piel blanquecina hay que repelarlas para que queden finas y tiernas.

Cocinamos como siempre con cantidades para 4 personas y que cada uno adapte las proporciones. Cortar en juliana fina una cebolla roja mediana, saltearla a fuego fuerte 3 minutos y añadir las habitas. Otros 3 minutos y añadir los chipirones limpios y troceados (2-3 por persona), otros 3 minutos, rectificar de sal y servir. Si queréis presentarlo de lujo reservad 1 chipirón por persona y hacerlo previamente entero a la plancha para colocarlo encima de cada plato con 1 ramillete de hierbabuena. Delicia total.

Antes de elaborar las habitas, que es mejor cocinar y tomar, deberíamos haber cocinado las albóndigas de merluza. Para ello, vamos a necesitar 400 gramos de lomo de merluza o pescadilla mediana limpio de piel y espinas, picado a cuchillo, mezclado con media cebolla picada fina y pochada, 100 gramos de miga de pan ya remojada en leche y escurrida, un huevo y 1 cucharada de perejil picado. Mezclar y reposar 15 minutos para que asiente. Mientras tanto preparar la salsa que acompañará a las albóndigas sofriendo 1 cebolla picada fina con 3 dientes de ajo también picados hasta que quede transparente. Añadirle 1 cucharada de perejil picado y medio litro de caldo de pescado (compradlo hecho, pero de calidad) y llevadlo a ebullición unos 10 minutos. Triturar fino y rectificar de sal.

Solo nos falta hacer las bolas del tamaño que más nos guste y freírlas a vuestro gusto: o pasadas por harina, o por harina y huevo o sin rebozar. Escurrirlas bien en papel de cocina y colocarlas en la salsa, que no las cubrirá. Simplemente darlas un calentón pilpileándolas 2 o 3 minutos (es decir, moviendo la cazuela en pequeños círculos para que salseen por todos los lados. Buenísimas también si le poneis un poquito de arroz blanco de guarnición.

Un día más, un día menos. Os recuerdo algo porque lo estoy sufriendo en carnes: ojito con las cantidades. O revienta la nevera o revientas tú.